Jonathan Nuez, presidente de la Asociación de Deportistas del Automovilismo de Canarias (ADAC), ha realizado unas reflexiones en su perfil de facebook donde defiende la importancia de la creación de este estamento que defiende a los deportistas.
Recuerdo un Rally de Santa Brígida, que después de gastarme un pastón en el nuevo motor, lo reventé llegando a la meta del primer tramo, con conato de incendio incluido. Cuando pasaron todos, como yo me quedé cerca de la meta, la grúa me sacó el último de varios y recuerdo que el jefe de tramo en el control stop se empeñó en dejar el coche allí cuando había una cuesta y apenas 50 metros para llegar al donde cortaban la carretera y mi grúa esperaba allí con las lógicas ganas de perderme ya de allí tras lo sucedido. Resultado tras varias palabras, mi copi, mi hermana, mi novia y yo, con la ayuda de varios aficionados, empujamos el coche cuesta arriba porque el señor se puso delante de la grúa y de allí no pasaba... Cuestión de actitud.
Cuando recibí la invitación a formar parte de un nuevo intento de formar una asociación de deportistas del automovilismo debo admitir que tenia muchas dudas. Incluido a la persona mas cercana a mi todos los días, mi mujer, le insistía que no quería involucrarme mucho con aquello... Ella, que me conoce bien, no se lo creyó. Tras ver en las primeras reuniones, donde habían mas compañeros de lo habitual, fui creyendo que esta vez iba a ser diferente. No así otro grupo de compañeros y, principalmente, los encargados de llevar los designios de nuestro automovilismo que en aquel momento se lo tomaban broma y se reían bastante. Muchos compañeros, tras una serie de decisiones que se pretendían tomar, dieron un ejemplo jamás visto de unidad a nivel regional tomando una decisión drástica por el nivel de hartazgo en un sonoro ya está bien!. Cuestión de actitud.
Las fotos que llegaban de las diferentes asambleas regionales hicieron encender las alarmas de aquellos a los que les gusta tener a todas las cabritas bien controladas en el corral y tras alguna reunión de crisis, decidieron retroceder en algunas medidas, creo que pensando esto acabaría aquí... Ahí la maquinaria de bombardeo masivo en chats y otros foros eran diarios para dinamitar aquello cuanto antes y las bromas y risas se convirtieron en ninguneo a lo conseguido. Bueno, ya que estamos aquí, habrá que seguir trabajando; se dijo. Lo primero que se creyó vital para todos, y es lo que mas se nos exige, como no puede ser de otra forma, era en la seguridad, y tras una serie de preocupaciones por parte del colectivo a nivel regional con respecto a incidentes ocurridos en el pasado, nos fuimos al organizador del primer rally, con unos argumentos sólidos sostenidos por hechos concretos. Ahí el nivel de tensión por los pasos que estábamos dando y las dimensiones adquiridas en tan poco tiempo se notó desde el primer momento y la respuesta principalmente por parte de uno de los miembros que nos recibió fue de tono bastante agresivo, hasta el punto que al final del encuentro pidió disculpas. Cuestión de actitud.
Digo todo esto porque tras el desarrollo de dicha reunión y la poca predisposición a aportar información, algo lógico si no se está acostumbrado a ello, hizo que, tras informar a los compañeros, muchos de los que tenían intención de participar decidieran no salir. Ahí la maquinaria de foros varios ya estaba al tope de RPM. El paso siguiente, ¿cual es? Pues verter todo tipo de calificativos hacia la asociación, como radicales, populistas, descerebrados, coaccionadores... Estos dos últimos calificativos en acto oficial! Ojo... Y buscando a la desesperada que, socios, colaboradores o equipos y pilotos importantes que habían manifestado su apoyo a la asociación no se sumen, sin importarles lo mas mínimo mentir descaradamente porque los que estuvimos allí sabemos lo que pasó. Cuestión de actitud. Respeto totalmente a los compañeros que han decidido libremente, como no puede ser de otra manera salir. Solo espero que respeten igualmente la decisión de no salir de otros compañeros, porque al fin y al cabo todo es cuestión de actitud.